
UNEDL otorga doctorado Honoris Causa a Kim Phúc Phan Thi (la niña del napalm)
En el marco de las celebraciones por el 50 aniversario de la creación de nuestra institución, UNEDL celebró la sesión solemne de investidura Doctor Honoris Causa a Kim Phúc Phan Thi, activista pro paz y sobreviviente de la guerra de Vietnam, quien, tras un análisis de la Junta de Gobierno y el claustro académico, fue considerada merecedora de esta máxima distinción.
En ceremonia llevada a cabo en el Hotel Hilton de la ciudad de Guadalajara y presidida por la Mtra. Claudia Robles Morales, Rectora de nuestra casa de estudios, así como por los integrantes de la Junta de Gobierno, el claustro académico, otros miembros de la comunidad universitaria y el Dr. Julio Jesús García Barreto, padrino de la aspirante al doctorado, se le impuso a la representante vietnamita-canadiense la estola que simboliza el grado de doctor.
También se le mostró el Libro de la Antropología, que simboliza el conocimiento universal del ser humano y se le entregó una medalla como símbolo de unión con nuestra universidad. Posteriormente, se tomó protesta de fidelidad a la nueva doctora.
Kim Phúc Phan Thi, mejor conocida como “la niña del napalm”, al igual que miles de personas, sufrió los estragos de la guerra entre Vietnam del Norte y Vietnam del Sur en el contexto de la guerra fría entre Estados Unidos y la Unión Soviética. Su aldea fue atacada con napalm, un arma química inflamable que dejó secuelas en su vida y en su cuerpo. A partir de entonces, ella se ha dedicado a las actividades que promueven la paz mundial y ha obtenido diversos nombramientos como el Premio de la Paz de Dresden y el de embajadora de la Buena Voluntad de la UNESCO, entre otros.
Finalmente, para concluir el acto, Kim Phúc Phan Thi pronunció un emotivo discurso y compartió con nuestras autoridades y la comunidad universitaria su experiencia, cómo esta moldeó su vida para inspirar la de los demás. Destacó la virtud que todos debemos tener como seres humanos: “la paz y el perdón”, dejando en claro a toda nuestra comunidad que ella es un ejemplo de vida digno de seguir.
Al finalizar este emotivo evento, se le entregó una placa conmemorativa que atestigua el lazo suscrito ante nuestra institución y su honorable persona. Acto seguido, entre aplausos y el júbilo de los asistentes, fueron despedidas las personalidades que nos acompañaron.